Alternativas ecológicas para calentar el hogar


Mantener los espacios de las casas cálidos durante la época de frío requiere de un consumo energético que conlleva a generar un gran impacto ambiental sobre el planeta, por eso en los últimos tiempos, han surgidos ideas naturales que permiten ahorrar energía y ayudar a minimizar el calentamiento global. Dentro de esas alternativas encontramos la calefacción ecológica que tiene la misma finalidad que la convencional, pero sin causar ningún daño al ambiente y, por ende, al ser humano.  

Los sistemas de calefacción tradicional proporcionan un ambiente agradable, pero producen una serie de problemas como humedad, movimientos de aire, ruidos, campos eléctricos, ionización y contenido de partículas y polvo en el aire, lo que produce daños en la salud de las personas como problemas respiratorios, falta de sueño, resequedad en la piel, cansancio y agotamiento. El ambiente también resulta dañado, por ejemplo: El uso de chimeneas conduce a generar gases que resultan muy toxicas para el entorno.

Alternativas ecológicas para calentar el hogar - Yammine

Una de las grandes alternativas que se usan para mantener cálido el hogar de manera natural, es empleando materiales adecuados durante su construcción y colocarlos apropiadamente para lograr que el calor permanezca por más tiempo. Pero por desgracia, esto no ocurre en la mayoría de las casas, por eso hay que implementar alternativas ecológicas que no ocasionen un impacto negativo en el planeta y no dañen la salud del hombre.

La Fundación Yammine ofrece algunas opciones de calefacción ecológica que se puede poner en marcha para tener un ambiente cálido durante los días de frío intenso, entre ellos tenemos:

1.- Paneles y acumuladores solares: La principal fuente natural que tenemos para mantener los espacios de las casas agradables cuando tenemos mucho frío es el sol. Para calentar el hogar con la energía solar, se necesita la ayuda de paneles y acumuladores solares que almacenan el calor, para luego ser usada en cada zona de la casa y asi tener una temperatura agradable en la época de invierno.

2.- Calderas de biomasa o pellets: Esta es otra opción ecológica que ayuda a tener un lugar cálido y disfrutar de estar en casa de manera segura. El pellet es un material que proviene del aserrín, el cual se seca y pulveriza para aprovechar toda su capacidad calórica, no genera dióxido de carbono y es una alternativa que permite calentar los espacios de manera rápida.  

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3.- Tejas de vidrio: Esta solución sustentable consiste en una cubierta de vidrio que sustituyen a las tejas convencionales y que permite el paso de la energía solar la cual es absorbida por una estructura que se encuentra ubicados debajo de ellas. Esta energía se transforma en calor o electricidad, es un sistema ecológico, muy simple y que reduce la huella ecológica.

4.- Suelo radiante: Conocido también como hilo radiante y consiste en la colocación de tubos por donde circula agua, la cual se calienta e irradia calor por cada rincón de la casa. Su inconveniente puede ser el precio y su colocación, sobre todo si la construcción ya existe, por eso se recomienda instalarlo cuando se está edificando la estructura o en aquellos casos de renovación.

5.- Emisores térmicos: Son un equipo de calefacción que se fijan a la pared y funcionan con energía eléctrica, pero tiene la salvedad de que trabajan bajo el principio de inercia térmica. Tienen algunas ventajas como: Conservan el calor por mucho más tiempo, no genera residuos tóxicos ni producen emisiones de CO2.

6.- Calefacción por infrarrojos: Consiste la emisión de rayos infrarrojos que son inofensivos y que calientan objetos sólidos como paredes, muebles e inclusive personas. Es un sistema de calefacción muy agradable y confortable y los expertos ven a esta opción como la más ecológica ya que no emite CO2 al ambiente.   

Estas opciones ecológicas tienen como finalidad ayudar a reducir la cantidad de emisiones de CO2, así como también residuos tóxicos que causan graves daños al ambiente y al hombre. Son alternativas eficientes ya que a mediano y largo plazo contribuye a la reducción de la energía eléctrica. 



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