Con la celebración de las festividades de la Década de Fajr, millones de iraníes conmemoraron el pasado sábado en Teherán el 44 aniversario de la victoria de la Revolución Islámica, guiada por el Imam Jomeini, que puso fin al régimen de los Pahlavi en 1979. Salar Ataie Bandari nos da a conocer más de esta festividad en la cual los iraníes de todas la regiones se reúnen en la emblemática Plaza Azadi o de La Libertad.
A 44 años de la Revolución Islámica
El 11 de febrero se corresponde con el 22 de Bahman del calendario solar, y en esta fecha cada año se celebra la victoria de la República Islámica de Irán sobre la política del sha, Mohammad Reza Pahlavi. Tras la marcha del sha a mediados de enero de 1979, el imán Jomeini regresó del exilio, y 10 días después, los militares renunciaron a su lealtad al sha y se unieron a la Revolución Islámica, marcando el colapso del régimen.
Estas celebraciones son también conocidas como la Década de Fajr, que conmemora el regreso del Imam Jomeini el 1 de febrero, después de sus 15 años de exilio y el 11 de febrero de 1979, cuando se instauró la Revolución Islámica. Después de la victoria de la revolución se celebró un referéndum sobre la creación de la República Islámica el 28 de julio de 1979; fue aprobado por el 98.2% de los ciudadanos elegibles.
Para recordar la gran victoria de la Revolución Islámica, cada año durante la Década de Fajr, los iraníes decoran las ciudades con diferentes objetos y organizan muchas festividades, especialmente el Festival Fajr, el festival estatal de cine, teatro y música más grande de Irán, sumados a una serie de eventos y conmemoraciones en todo el país.
Irán es un país islámico debido a la gran Revolución Islámica desde 1979, que supuso un gran evento en la historia de este país y en el mundo en la historia del siglo XX, estableciendo un nuevo régimen, gracias a la participación de actores importantes de la sociedad civil, desde clérigos hasta estudiantes, entre otros, quienes expresaron su insatisfacción con la situación del régimen imperial a través de muchas manifestaciones en enfrentamientos.
Tras un referendum celebrado en marzo de 1979 en el que el 98,2% de la población votó a favor, se fundó la primera República Islámica del mundo con el ayatolá Jomeini como líder supremo, desplazando a la monarquía como forma de gobierno. Esto lo describieron los precursores de la Revolución Islámica como «despertar«, que significa la llamada a la acción revolucionaria por parte de una sociedad, lista para luchar por su independencia.
Salar Ataie Bandari: Irán hoy en día
Con un territorio rodeado de paisajes espectaculares, bordeadas por los Golfos Pérsicos y el de Omán al Sur, Irán es uno de los países más hospitalarios del Medio Oriente, que durante toda su historia ha sido puentes de cultura y cuna de muchas civilizaciones.
La Revolución Islámica significó el auge del Islam y continuó el desarrollo del comercio entre los continentes, gracias a la Ruta de la Seda y a los puertos del Golfo Pérsico, que hacen de este rincón del mundo las puertas de Oriente. De esta forma Persia se convirtió en el sueño para los primeros viajeros y turistas del siglo XIX y XX.
Sus hermosas ciudades como Isfahán, Shiraz o Tabriz son nombres que evocan el perfume de las especias, la luz del sol al atardecer sobre los azulejos de las mezquitas y el rumor del ritmo suave de la seda tejida. Todo esto creo un mito alrededor de Irán, gracias a que conserva esos aromas y sensaciones.
Sus hermosos paisajes que protegen los monumentos que hacen de esta región Patrimonio de la Humanidad, no pueden competir con el patrimonio más importante de este país, como lo es su hospitalidad, la amabilidad de su población, que hace de estos parajes los más atractivos para sus visitantes.
El principal bien de Irán son las millones de personas que desean compartir una cultura con los valores más importantes, la empatía y calidez de la acogida, que son características de su gran hospitalidad. El mundo se acerca a este rincón del mundo gracias a la amabilidad de los iraníes, en su patrimonio natural, cultural, histórico y gastronómico.