Tras el éxito de Ainbo, la guerrera del Amazonas, el director César Zelada vuelve a explorar la cultura peruana con Kayara, una cinta de animación que tiene muy buenas intenciones pero que, al final del día, no consigue levantar el vuelo como debería.
- Fecha de estreno: 30 de abril de 2025
- Género: Animación, Aventuras, Infantil
- País: España, Perú
- Año: 2025
- Duración: 90 min
- Dirección: César Zelada
- Música: Toni M. Mir
Tras el éxito en taquilla de Ainbo, la guerrera del Amazonas -ganadora del Premio Platino a la Mejor Película de Animación-, el cineasta peruano José Zelada, nos ofrece Kayara, un canto al empoderamiento femenino.
En la película, una joven inca sueña con unirse al grupo de mensajeros Chasqui, compuesto exclusivamente por hombres. La heroína desafía las tradiciones y las normas de género para perseguir su ambición, contra viento y marea.
Crítica ‘Kayara’
A nivel visual, la animación de Kayara no está del todo pulida. Hay momentos en los que las texturas dejan mucho que desear y los movimientos, sobre todo en escenas de acción, se sienten un bastante ortopédicos. Eso sí, el diseño de los personajes es bastante llamativo, y tiene algún secundario simpaticote, como una cobaya que intenta robar plano a cada segundo. Esos detalles funcionan, y se agradecen.
El doblaje al castellano es bueno. Bastante bueno, de hecho. Pero una parte de mí se queda con las ganas de haberla visto con doblaje latino, más fiel al contexto. Es como si a Encanto le hubieran quitado el acento colombiano o a Coco el sabor mexicano. Algo se pierde en esa transición, y aquí se nota.
La música y el guion de Kayara
Musicalmente, hay momentos que evocan cierta ensoñación, una especie de canto nostálgico al pasado y a las raíces peruanas que me ha gustado. La banda sonora, sin ser espectacular, acompaña bastante bien y refuerza el tono épico del relato.
El problema más gordo es el guion. Demasiadas tramas en una película tan corta: el viaje iniciático de Kayara, la lucha contra el machismo, el misticismo inca, y de repente… los españoles. Todo se mete con calzador y al final da la sensación de que el guion está hecho por una IA con prisa. El ritmo es irregular: arranca bien, pero en la mitad se pega un bajón importante. Luego repunta un poco, pero ya es tarde. Y el villano… de manual. Totalmente olvidable.
Una edición lamentable
Las transiciones son horribles. El montaje es, probablemente, lo peor de todo. Cortes abruptos, escenas que no conectan entre sí y una edición que parece hecha sin ningún tipo de mimo. Y si hablamos del final… sobrepasa lo predecible. Es lo típico que ya hemos visto mil veces y, aunque es verdad que es una peli para niños, uno espera un poquito más de riesgo narrativo.
Dicho todo esto, Kayara no es un desastre. Tiene cosas que salvan los muebles: su valor cultural, su acercamiento a la mitología andina, y ese mensaje de romper moldes y barreras. Para el público infantil es una opción interesante, sobre todo si se busca enseñar algo de historia y tradición desde la animación. Pero para el resto… deja bastante que desear.