Después de estar presente en el partido de su equipo, el Galatasaray en un empate con su archirival, el Federbahce, en Estambul, Mauro Icardi vuelve a la Argentina y se encontrará con varios embates que complicarán el reencuentro con sus hijas.
Elba Marcovecchio, su abogada, ya habló diciendo que Wanda Nara es una “denunciante serial”, pero esta vez tendrá que enfrentarse junto a su equipo de letradas a una inminente denuncia por parte tanto de Wanda como de Maxi López, por un supuesto maltrato a uno de los hijos varones de la pareja.
Como lo contaron en LAM, la pista de esta historia surgió en los tests psicotécnicos del Lincoln College, la escuela adonde concurren los cuatro hijos menores de Wanda y uno de los varones manifestaba una tristeza que llevó a la Institución a querer saber más sobre lo que vive el niño.
Sin dar más datos, informaron en el programa que se trataba de un relato relacionado a Mauro, seguramente en el marco de la dificil separación de su madre, recordando “coscorrones” por parte del futbolista y situaciones de humillación hacia el hijo de Wanda. Por ejemplo, que cuando empezó el tema del enfrentamiento con Wanda, Icardi comía con sus hijas en el comedor y hacía comer a los hijos de López en la cocina. Manifestó miedo a su padrastro.
Si bien Maxi López no perdió el contacto con sus tres hijos tras el divorcio de Wanda, hay que reconocer que Mauro Icardi fue un padre para las criaturas en ese momento pequeñas.
La Justicia dirá en esta causa complicada, en medio del pedido de reencuentro de Icardi para con sus hijas.