
Una película entrañable y familiar, que entretiene a niños y adultos por igual, con un tono reflexivo que empodera para volar alto, porque el cielo no es el límite
Reseña | Opinión de la película ‘Migration’ (Migración. Un viaje patas arriba). Estreno en cines el 22 de diciembre de 2023.
‘Migrac¡ón. Un viaje patas arriba’ (‘Migration’ en su título original y ‘¡Patos!’ en Latinoamérica), de la casa productora Illumination (‘Super Mario Bros‘, ‘Minions’ y ‘Mi villano favorito‘), es la película animada más entrañable para lanzarse a ver esta temporada en familia.
Es divertida -se nota que lleva la pluma de Mike White, creador de ‘The White Lotus‘- y reflexiva porque el mundo es muy grande como para nadar todo el tiempo en las aguas de confort. Así que, quitaos la pereza y: ¡al agua patos!
Vamos allá con nuestro análisis, impresiones y opiniones de la película ‘Migration’ (Migración: un viaje patas arriba o ‘Patos’ en Latinoamérica).
¿De qué va ‘Migración: un viaje patas arriba’?
La trama gira alrededor de la familia Mallard, encabezada por papá Mack, su esposa Pam e hijos, Dax y la adorable patita Gwen, simpática y derrochadora de una ternura ilimitada. Viven en las aguas tranquilas de un estanque de Nueva Inglaterra y el patriarca peca de sobreprotector porque le da miedo volar y nadar en otras aguas y cielos. Por su parte, Pam es mucho más visionaria, valiente y quiere conocer el mundo para que sus pequeños vuelen hacia un futuro enriquecedor, lleno de descubrimientos y aventuras.
El hambre de Pam por comerse el mundo se intensifica cuando una familia de patos llega a su estanque, cuenta numerosas hazañas de la vida e invita a los Mallard a que migren al paraíso tropical de Jamaica. Por lo que logra convencer a su marido para desplegar las alas y comenzar juntos una travesía que tendrá una escala interesante en la vibrante Nueva York.
Una película sin miedo al éxito
A lo largo de la trama ‘Migración. Un viaje patas arriba’, bajo la dirección de Benjamin Renner (‘Ernest & Célestine‘), se nos insiste en que superar el miedo es el primer paso para crecer y tener una vida más plena. No obstante, a través de diálogos inteligentes, aborda de manera elocuente la dicotomía entre la juventud ansiosa por nuevas experiencias y la reticencia de los mayores a aventurarse a lo desconocido y mantener la cautela arraigada a la estabilidad.
En el camino, las risas no faltan y tampoco los momentos de tensión, pues nos hace pasar por todo un termómetro de emociones. El filme, de hecho, critica abiertamente a la industria alimentaria y sus métodos de producción, en lo referente al proceso de crianza y el sacrificio de estos animales para satisfacer los paladares humanos con platillos gourmet como el famoso pato a la naranja.
‘Migración. Un viaje patas arriba’ es una obra de arte
Lo que sí es muy disfrutable es el elemento visual, simplemente espectacular. Nos cautiva en cada fotograma, desde los impresionantes contrastes de los paisajes naturales hasta la representación de la bulliciosa Nueva York con una gama de colores cuidadosamente seleccionada, que destila elegancia y constituye una auténtica obra de arte.

El diseño de los personajes de ‘Migración. Un viaje patas arriba’, tanto protagonistas como secundarios, también es soberbio. Con rasgos que resaltan su personalidad y, a su vez, el plumaje de las aves eleva la película a otro nivel. Todo ello con la atinada música del compositor John Powell (‘Cómo entrenar a tu dragón‘) que vuelve cada momento emocionante, en las nubes o en la tierra.
El cielo no es el límite
En definitiva, ‘Migración. Un viaje patas arriba’, mediante las peripecias de sus protagonistas emplumados, destaca cómo la unión familiar es clave para dejar atrás los miedos y obstáculos. La travesía de estos patos no solo es una aventura animada, sino un recordatorio de cómo podemos volar muy alto y alcanzar alturas inimaginables porque, definitivamente, ¡el cielo no es el límite!
Nos invita a abrir la mente. Hablo de los reticentes a las películas de animación infantil, entre los que me incluyo. Es un ejemplo de que el buen cine no tiene género.